Llegue
a esa enorme casa , me sentía tan fuera de lugar nada había cambiado
desde pequeña, pero aun así, mi madre había quedado en no se donde,
Alex me había dicho que estaba con su padre y que los dejáramos hablar. Voltee a verlo estaba ido, sin expresión alguna, tal vez este
triste.
Me
puse enfrente de el con un pequeño giro y a una distancia prudente y
con una sonrisa que nunca me había salido tan natural me atreví a
preguntar.
-y
en esta enorme casa ¿donde
esta mi habitación?
Me
miro a los ojos y sonrió, ¿casarme con el sera un error?, no lo se,
de todas maneras no tenia opción, yo no decidí casarme, pero algo era
seguro, el era el muchacho mas apuesto de todo el mundo y sus ojos
verdes no ayudaban a concentrarme mejor pero afortunadamente alcance
a oír la respuesta.
-- ¿Te he dicho que
siempre me había encantado que fueras así? - su pregunta me sorprendió, pero el no borro su sonrisa.
-¿Así como?
-Así de optimista,
siempre eres así de alegre, así de emocionada por todo.
-¿Eso es malo?
-No, claro que no, es
solo que me sorprende encontrar a alguien así.
-Pues la verdad no,
normalmente estoy simplemente normal, pero hoy amanecí con muy buen
humor, no se por que.- mentira, era un pretexto.
-Pues, me alegra conocer
eso de ti... es lindo.
Su
sonrisa no se borro en ninguna de las palabras que pronuncio y sus
ojos verdes se enternecieron cada vez mas, ¿habrá alguien mas
apuesto en esta tierra?, no lo creo.
--Gracias – pude haber
imaginado mi sonrojo, me volví a dar una vuelta para estar a lado de
el y seguir caminando por el pasillo.
--Dormiremos en la misma habitación
--Que?! - mis ojos se
abrieron de la sorpresa y lo asustada que estaba, yo soy pésima para
dormir en las noches siempre termino pataleando la cobija, o si no
babeando.
--Claro, digo estamos
comprometidos ¿que esperabas Sofya?
--Claro , pero esto fue
mas un acuerdo, esperaba dormir separada de ti.-eso era como algo
obvio.
--Pues lamento haber decepcionado tus expectativas, pero no es así.
Mi
optimismo bajo, agache la cabeza viendo hacia mis zapatos, que va a
pensar de mi!, soy pésima en la cama por las noches y lo digo completamente fuera de albur, pataleo, aveces hasta ronco por dios!, seguía absuelta en mis pensamientos hasta que choque con algo o mas
bien alguien..
-Oh dios mio! Señorita perdóneme por favor fue mi culpa no volverá a pasar- alce la vista,
soy un desastre, había chocado con un muchacho rubio y apuesto, traía el uniforme de los que trabajan en la casa y le había regado unos
vasos de whisky que supongo tenia servidos para mi “suegro”.
-No te preocupes discúlpame a mi iba muy distraída- me agache a ayudarle a recoger un
vaso y lo puse en la bandeja de plata.
Le
dije en voz baja al muchacho mientras le ayudaba a recoger que
sirviera otros dos whiskys y que me disculpara otra ves, me levante ,
pero Alex tenia la mirada clavada en mi, lo supe por que la podía sentir, su mirada era tan penetrante que me hizo voltear, mi sorpresa
fue muy grande cuando vi la sorpresa de el, tenia los ojos abiertos viéndome impresionado, solo le faltaba la boca abierta para parecerse
a una caricatura.
--Sucede algo?- pregunte
con cautela, el movió su cabeza de un lado a otro regresando a la
realidad.
--Lo hablaremos en
nuestra habitación- me respondió con una sonrisa tierna, ¿es que
acaso lo unico que le causo a ese hombre es ternura?! .
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